En junio de 2025, varios países de la Unión Europea reconocieron formalmente la existencia de importantes deficiencias estructurales en la red de interconexiones eléctricas del continente. Estas “lagunas” —según recoge el documento oficial publicado tras una cumbre energética de alto nivel— ponen en entredicho uno de los pilares fundamentales del mercado único de la energía: la capacidad de transportar electricidad entre Estados miembro de forma eficiente, segura y económica.
Este reconocimiento no solo tiene implicaciones técnicas o geopolíticas. También repercute directamente sobre el trabajo diario de los gestores energéticos, que operan en un entorno cada vez más volátil y con mayores exigencias. En este artículo analizamos qué implican estas lagunas, cómo impactan en los precios de la electricidad, y por qué herramientas como Optimaria, software de automatización y análisis de tarifas, se están convirtiendo en aliados imprescindibles para los profesionales del sector.